FAST FASHION: UNA IDEA CADUCADA
¿Funciona la moda rápida en un mundo en el que intentamos ser más responsables con el medio ambiente?
El sector textil ya nos advertía del gran impacto medioambiental que suponía, pero aún así, no ha parado de crecer. Incluso en época de confinamiento por Covid-19, con el mundo paralizado, la industria de la moda siguió siendo el segundo sector más contaminante del mundo.
Las empresas responden a una demanda producida por el cliente. ¿No deberíamos reflexionar sobre nuestro consumo y favorecer la apuesta por una producción sostenible?
La moda sostenible con el planeta no es una tendencia, es una filosofía y una necesidad para la sociedad moderna en la que vivimos. A raíz de esta idea nació en Suecia el término Köpskam, que ya ha llegado a España, y tiene como definición: la vergüenza por comprar ropa de usar y tirar debido al alto coste medioambiental que supone producirla y después desecharla.
Esto explicaría una de las tendencias que está pisando muy fuerte este año, y que ya pudimos ver el año pasado: la ropa vintage y de segunda mano.
Cada día vemos en la televisión publicidades de aplicaciones destinadas a la venta de segunda mano y, por si os queréis introducir en este mundo, os dejo un listado de algunas de ellas:
- Vinted
- Wallapop
- Vestiaire Collective
- Pinzkin
- Vibbo
- Percentil
Son muchos los diseñadores y modistos que están cambiando para no perjudicar a nuestro planeta. Entre ellos Giorgio Armani, quien pone en tela de juicio los excesos del sistema de moda actual, que tiene como base el consumo masivo y la superproducción, sin importar el medioambiente. El diseñador reclama un calendario de la moda más sensato y añade que “el declive del sistema de la moda, tal y como lo conocemos, comenzó cuando el sector del lujo adoptó los modos de funcionamiento de la moda rápida con un ciclo de entrega continuo, con la esperanza de vender más”. “Las finanzas se han impuesto a la creatividad”.
Gema Gómez, fundadora de Slow Fashion Next, utilizó una metáfora que da para reflexionar: “Esta industria, tarde o temprano, caerá. Esos dinosaurios del sistema que producen de manera deslocalizada y sobrepasando los límites del planeta, no están en armonía con el siglo XXI”, y se pregunta: “Cómo cambiaría la cosa si dijésemos ‘el que contamina paga’”
Os dejo un video sobre la industria textil en Bangladesh
Patricia Torres Càmara – Visual Merchandising y Estilismo.
1 comentario
1. Formación online | 4 marzo 2021 - 14:41
Espero que evolucionemos al punto de no hacer daño ni al medio ambiente ni a los animales, ahí es cuando será una moda buena y no como ahora…
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